Tener las encías retraídas es una situación más frecuente de lo que podíamos pensar. Un gran número de pacientes que recibimos habitualmente en la consulta presentan este tipo de problemas. En blogs posteriores, hablaremos de la solución.
La retracción de encías puede tener diferentes causas que deben valorarse antes de determinar algún tipo de tratamiento. Lo más habitual es que se deba a una evolución de la periodontitis o piorrea.
En estos casos la retracción se produce en todos los dientes por una pérdida del hueso que soporta los dientes. Como consecuencia de la periodontitis pueden aparecer espacios entre los dientes, una aumento de la movilidad y un aumento de la sensibilidad como consecuencia de la exposición de la raíz del diente.
La retracción de encías tiene dos causas principales que son la periodontitis o piorrea y una técnica de cepillado traumática
La segunda causa más importante para la retracción de encías es un cepillado traumático. En estos casos la retracción aparece únicamente en una de las caras del diente y no tiene por qué afectar a todos los dientes.
Hay otros factores que pueden acelerar la aparición de este tipo de problemas. Una mala posición de los dientes, la utilización de cepillos duros, tener una encía fina o una mala higiene oral son factores de riesgo que pueden favorecer la aparición de retracciones.
Para una resolución del problema, es recomendable acudir al periodoncista para una valoración ya que el pronóstico del tratamiento depende de la causa del problema.